El frío que yo siento es el que vos provocás en mi. Así como también provocás otras sensaciones las cuales no voy a mencionar, ya que últimamente son escasas.
Este famoso frío me penetra hasta el alma, dejándome sin aliento y sin ganas. Ganas de seguir peleando, de querer un futuro. Pero el equivocado sigo siendo yo,
Generalmente cuando una persona tiene frío lo que hace es abrigarse, buscar calor, combatirlo. Yo en este caso le abro todas las puertas, para que se quede a vivir. Porque aún así proviene de lo que yo tanto anhelo y si tuviera que crecer de golpe, supongo que no tendría problema alguno.
Crecer, seguir madurando y madurando constantemente. Nunca una satisfacción emocional, que son las que más llenan al alma. Tal vez algunos se basen en el libido, pero jamás podrán tener el corazón cargado. Solamente hay vacío, e inconsciencia.
Esa inconsciencia que ayuda a no darle importancia a nada. Porque se lo pasa bien, en un momento determinado. Pero después solo queda el recuerdo,
No sé como llegué hasta acá, pero te quiero recordar que todo lo que entrego es real. Y todo lo que recibo también es real, pero no mi realidad.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario