miércoles, 23 de abril de 2014

Más mierda

Después del gran fracaso anterior, lo único que me queda en claro es que hay que ser constante en el tema. Servirá de experiencia, como el resto de las cosas. Pero bueno, vamos otra vez.

En esta oportunidad quería expresar mi odio profundo hacia las personas que de un día para el otro hacen cortocircuito y dejan de mantener una idea o sentimiento. Y decir que, si hubieran escuchado en el momento, no estarían como están ahora. Ojo, no me afecta en lo más mínimo, al contrario, lo disfruto como a un partido de fútbol en HD.
Haciendo hincapié en este tema, me puedo retrotraer a aquella época donde todo era color de rosa, ponele. Ahora voy a hacer una pausa, para poder volver a revivir recuerdos pasados.

No hace tanto, aparecía una imagen angelical, con rasgos humanos, que aparentaba traer paz para el individuo en cuestión. Pero sin notarlo, ésta le jugó una mala pasada y vació su alma, hasta el punto de la pérdida del ser íntegro. Todo fue en cuestión de semanas, las cuales nunca olvidará. La persona murió, naciendo consigo una nueva víctima del "te ilusiono y me voy".
Es frecuente escuchar de casos como el anterior, pero pocos lo exponen por temor a la vergüenza pública. Aunque pensando un poco, vergüenza es ser el victimario en este asunto. Si conocés a alguien que lo padezca y sentís que tenés el poder para ayudarlo, hacelo. Te lo va a agradecer siempre.

Cambiando de tema, quería actualizar un poco la información. Esta versión, al parecer, vino con cambios internos. Demasiados, a corto y largo plazo. Los primeros están moviéndose en este instante, adquiriendo una forma que asusta; nunca imaginé pensar y actuar de la manera en que hago ahora mismo.En fin, no es tan sorprendente pero es un poco extraño.

Y para terminar esta mierda, porque se puede apreciar que ya no es igual al principio, una retórica:¿Alguna vez contaste las veces que moriste para poder volver a nacer?

miércoles, 16 de abril de 2014

Actualización anual

Hoy es, relativamente, el mismo día que ayer. Hoy, también, puede ser el mismo día que mañana. En sí, un día diferente para cada persona que habita este pequeño gran planeta, por millones de motivos y razones específicas, que no importan en este momento. Pero hoy, la persona íntegra que narra este evento, tal persona, tiene una celebración.
No es costumbre, aunque esta vez se rompe la rutina anual. Festejar una fecha que sólo está asentada en el fondo del alma, una fecha que no corresponde a nadie más sino a . A pesar de que no esté muy de acuerdo, porque convengamos que cumplir un ciclo anual de vida no te da supérpoderes, hoy estoy haciendo un pacto entre mis seres interiores y decidí tomar partida en el asunto.
Me refiero a que me alegra, un poco, que haya llegado este día. Sin embargo, la lucha entre el pensamiento anterior y el original continuará hasta el final. Porque es muy difícil sacarse una idea de la cabeza, se complica expresar lo complejo. Ya hasta no puedo desgranar lo que quiero transcribir, la batalla comenzó.
Una pelea entre un año saliente y uno entrante, donde los cambios radicales pueden aparecer. No es para tomar de excusa, obvio. Simplemente aclaro lo tedioso que me resulta contar algo que se debate entre varios yo, alojados en mi mente.
Una última confesión, como para que no sea pobre. Radio, yo tengo que poner una radio

Nota: Una persona necesita (hablo por mí) 2 meses para incorporar cosas vividas en el presente. Por ende, si me pasa algo en el mes 1, ese algo estará dentro completamente en el mes 3. Esto mismo se traslada (a medida), con el tiempo de vida, para obtener un parámetro inteligente de la persona. Ahora bien, al modificarse de la teoría original, parte de una base en la que dice "Una persona tiene noción de lo que vivió, en un momento determinado, 2 meses exactos después; simple sería, recién pasados los 2 meses de su aniversario, lo incorpora dentro de sí".

Nada que decir, nada que contar.
Nada que pensar, nada que sufrir.
Nada, nada más que morir.
Morir para poder vivir.