domingo, 25 de mayo de 2014

Primera sesión

P: -Contame, ¿qué te pasa?-
Y: -Tengo bronca, estoy frustrado, fastidiado, no sé qué me pasa.-
P: -Principalmente, ¿por qué razón?-
Y: -No sé qué hacer de mi vida, no encuentro una motivación para hacer algo, nada. Ya no quiero estar más acá adentro encerrado todos los días, pero no sé de qué manera cambiar el presente.-
P: -¿Es sólo eso?-
Y: -No, también es por otras cosas que se sumaron. No puedo tomarle tan rápido afecto a una persona, siempre me pasa lo mismo y termino haciéndome la cabeza.-
P: -¿En qué sentido? Explayate.-
Y: -O sea, por ansioso. Todavía no me contesta desde ayer, pero tranquilamente puede contestar. Eso es, y me pongo a pensar en todas las posibilidades del por qué no lo hace.-
P: -Pero, ¿qué vínculo tenés?-
Y: -Ninguno, ni siquiera la conozco. Pero no sé, simplemente no lo sé. No puedo entender por qué me pongo así, ya no aguanto.
P: -¿Le volviste a hablar?-
Y: -Sí, y nada. No hubo respuesta alguna. Todo esto más lo anterior me está comiendo la cabeza.-
P: -¿Y qué derecho tiene de responderte?-
Y: -Ninguno… pero me afecta. No sé por qué soy así.-
P: -Ya te encariñaste. A mí punto de vista, es demasiado pronto. Y por lo visto, en realidad ese es el punto clave que desencadena todo lo demás. Porque estoy seguro de que si ya te hubiera dado señales de vida, el resto sería más ameno.-
Y: -Tal vez. No lo sé. Tengo miedo de que no lo haga nunca más.-
P: -Pero, recién empieza. No te desesperes, no sabés tanto como para estar seguro que no quiere hablarte. Quizá tenga cosas que hacer, quizá su manera de responder no sea igual a la tuya. Tratá de tener un poco más de paciencia.-
Y: -Está bien, es que es difícil por el ritmo que tenía. Me es raro que esté pero no para mí. Y ya sé que no soy nada, que ni siquiera la vi, pero me llegó. Me llegó sin querer, no lo planeé ni nada.-
P: -Tu problema es no poder esperar, querer todo ya. Las personas no son iguales a vos, tienen sus tiempos. Y si de verdad no lo quiere hacer, no te preocupes que no será ni la primera ni la última. Tranquilo, tenés que aprender a poder estabilizar tus pensamientos. No siempre es igual, pueden pasar muchas cosas y no es tu deber sacar conclusiones o hipótesis. ¿Está claro?-
Y: -Sí.-
P: -Bueno, me parece bien que hayas manifestado todo esto. La próxima que sea más seguido, ¿sí?-
Y: -Está bien, gracias.-

lunes, 19 de mayo de 2014

Resumen de las 5

Creo que llegó la hora de hacer lo correcto. No más vueltas, es momento de anunciar lo siguiente: necesito salir de acá. Todos los días lo mismo, encerrado, es aún más aburrido que situaciones pasadas. Se puede hacer algo al respecto, pero he aquí otra cuestión: no hay seguridad.
Resumiendo un poco, tomar una decisión firme se complica mucho este último tiempo. Culpa de la edad, ya que significa un giro brusco hacia un camino sin certeza, donde lamentablemente hay mayor tendencia a resultados negativos. Es como si estuviera aguantando, hasta que algún hecho suceda de repente y estimule al cerebro para accionar en reacción. Algo complicado, desde luego.
Nunca hablé sobre irse del país, y la verdad es que no estaría nada mal. Empezar de cero, ser otro, no morir en la calle, cosas positivas a simple vista. Fácil no, ni adentro ni afuera. Tal vez sea la manera más caballerosa de morir la que se elige.
Sin hacerlo muy extenso, voy a intentar hacer una lista de cosas para realizar en un futuro cercano. Y recién ahí voy a poder volver a vivir otra vez.

viernes, 9 de mayo de 2014

Intento de nota 1

Quedarse inmóvil frente a una pantalla inerte, mirando hacia abajo, y saturado de pensamientos, es uno de los estados que aumenta el odio a sí mismo. No poder separar los canales de la mente, por la ansiedad que se siente al encontrarse en una situación aberrante, llena de la mismísima nada, también ayuda a ese odio. Nada tira de un lado o del otro, estática pura. Usar en este momento una parte del cerebro para transmitir, es simplemente suerte.
Así como me parece erróneo forzar una inspiración, inhibirla también. Muchas veces uno se ve obligado a guardarse sus momentos cúlmines de creatividad, por razones varias, y lo que se logra es perder poco a poco su habilidad de crear, dando por sentado que el lapso de espera entre dos momentos de inspiración será más extenso.

Cambiando de tema, se nota mucho la diferencia en cinco años. Por lo menos de esta época, ningún mecanismo mental funciona igual que antes. Hay cosas que avanzaron y otras que retrocedieron, y cosas que directamente son distintas. También se agregaron y eliminaron varios aspectos, dentro de lo relativo: buenos y malos. En fin, todos esos procesos no dejan de producir sorpresas ínfimas cuando se los piensa.
Necesitaría inventar, contar la nada no sirve mucho, describirla tampoco. Pero al menos así se puede mentir, que sirve para poder seguir adelante sin tener que empezar. Y me refiero, a empezar algo nuevo de cero otra vez.